Psicoterapia Holística

Iniciar el camino de la meditación

Sin duda la práctica de meditación es uno de los temas más importantes y al mismo tiempo más confusos que experimentamos. Es confuso por nuestras propias expectativas de que la práctica de meditación debería generarnos cierto sentido de tranquilidad, equilibrio, y experiencias espirituales alucinantes.

Me gustaría enfatizar que la práctica de la meditación tal y como fue presentada por el Buddha no es ni más ni menos que trabajar con uno mismo – sentarte con uno mismo, solo, sin entretenimiento, sin ninguna retroalimentación ni estímulo.

La práctica de Meditación sentada es la de simplificar la propia psicología básica y los propios problemas básicos. Simplificar en este contexto es, no tener expectativas a cerca de la técnica, no esperar que la técnica nos vaya a liberar o proporcionar oleadas de emociones o experiencias místicas. Para poder ser consistente con la enseñanza del Buddha, me gustaría presentar el hecho de la meditación como algo extremadamente simple y sin ningún revestimiento metafísico o filosófico.

Para poder beneficiarse de la meditación, se necesita algo más que sólo echarle un rápido vistazo. Se necesita hacer un compromiso de entrenarse a uno mismo en meditación, de otra manera habrá muchos huecos, se estará perdiendo el objetivo y se experimentará confusión innecesaria. Por lo tanto es importante sujetarse a la práctica siguiendo las instrucciones que se reciben y lo mejor será considerar la meditación como una forma de vida.

Mientras estás meditando, surgen toda clase de pensamientos y toda clase de pendientes que constantemente atraviesan por la mente, simplemente déjalos surgir, no trates de ver si son pensamientos malos o particularmente buenos, solamente déjalos suceder de la manera más simple que puedas. Dejándolos suceder, encontrarás que hay una sensación de apertura y entonces tus pensamientos dejan de ser amenazantes o particularmente provechosos, simplemente se convierten en el chismorreo general de tus pensamientos. Este tráfico de tus pensamientos y la verborrea de tu mente son simplemente parte de la charla básica que sucede todo el tiempo en el universo. Déjala suceder.

Extracto traducido de una meditación guiada que dio el maestro Chogyam Trungpa Rinpoche.